jueves, 30 de julio de 2015

TILÍN, TILÍN

En el seminario el Padre Superior está a punto de ordenar sacerdotes a Andrés, Benito y Carlos, pero tiene sus dudas acerca de la vocación de ello, así que compra una revista de Playboy y les dice que se aten una campanita en ese sitio que estáis pensando.
Llama a Andrés, le enseña la portada; enseguida oye tilín, tilín: Que salvajada, que escándalo, vete ahora mismo a tomar una ducha fría, a ver si arreglamos eso.
Llama a Benito, le enseña la portada, pero no pasa nada, le enseña el poster central y entonces se oye tilín, tilín: Venga, a darte una duchita fría.
Llama a Carlos, le enseña la portada, el poster y toda la revista, pero no pasa nada: Muy bien, Carlos, estoy sinceramente orgulloso de ti. Te voy a ordenar sacerdote ahora mismo, pero antes date una ducha fría con Andrés y Benito. Rápido se oye Tilín, tilín, tilín, tilín, tilín, tilín, tilín, tilín, tilín…

sábado, 25 de julio de 2015

LA SUERTE DEL PERDIDO...

Un periodista llega a un paraje montañoso para hacer un reportaje sobre la vida del lugar.
Aborda a uno de los aldeanos y: Por favor, cuénteme algo anecdótico de esta región.
El aldeano comienza: Una vez se perdió una cabra de nuestro rebaño, y como es la costumbre, nos reunimos todos los de la aldea, bebimos todas las botellas de vino y salimos juntos a buscarla al monte. Cuando la encontramos, como es la costumbre, volvimos a beber y uno por uno hizo sexo con la cabra.
Oiga, este reportaje será público. Mejor me cuenta algo alegre de la región.
Bien, una vez se perdió en el monte la mujer de un vecino y, como es la costumbre, todos bebimos y salimos en su búsqueda. Al encontrarla, como es la costumbre, bebimos y cada uno hizo sexo con ella.
Mire, mejor cuénteme algo triste.
El aldeano, limpiándose una lágrima que comenzaba salir de sus ojos, continuó: Una vez yo me perdí en el monte...

lunes, 20 de julio de 2015

EL VENTRÍLOCUO

Un ventrílocuo se quiere retirar del mundo del espectáculo y comprarse una granja.
Mientras un granjero le enseña la suya, la cual está en venta, decide gastarle una broma.
Cuando pasan al lado del caballo, dice: Este tío esta gordo como una foca, me destroza cada vez que se me sube.
El granjero se queda colorado y sorprendidísimo y le sigue enseñando la granja al ventrílocuo.
Al pasar junto a los cerdos, dice: A ver si le vendes la granja a este tipo, porque hueles mal y no te aguantamos más.
El granjero se queda de nuevo coloradísimo y sorprendido pero le sigue enseñando la granja. De repente le dice al ventrílocuo: Ahora vamos a ver a la cabra, pero no crea nada de lo que le diga, porque es una mentirosa incorregible.

miércoles, 15 de julio de 2015

EL ESPÍA

Llega al aeropuerto de Moscú un espía huyendo del Servicio Secreto Ruso (KGB).
Sintiéndose acorralado y próximo a ser atrapado, ve a una monja que estaba parada en el medio del salón y desesperado: Hermanita, ¿me permite que me esconda bajo sus hábitos, ya que soy espía y están a punto de atraparme los de la KGB?
La monja accede y 30 minutos más tarde, cuando hubo pasado el peligro, el espía sale de debajo de los hábitos y: Muchas gracias, hermana. ¡Me ha salvado la vida! Además de agradecerle, tengo que pedirle disculpas, porque no pude resistir la tentación y en un momento le besé la pantorrilla. ¿Lo notó usted?
Sí, hijo, lo noté.
Y además, hermana, tampoco pude resistir la tentación y le besé sus muslos. ¿Se dio cuenta?
Sí, hijo, me di cuenta.
Una pregunta, hermanita, ¿qué hubiera sucedido si la beso más arriba?
La monja: Me hubieras besado un huevo, porque yo también soy un espía.

viernes, 10 de julio de 2015

MONSEÑOR

La secretaria del convento está escribiendo una carta y comienza: Querido Monseñor.
Se da cuenta de que aquel puede mal interpretar sus palabras y vuelve a empezar: Excelentísimo Monseñor.
Recapacita pensando que es demasiado formal y escribe: Sr. Monseñor.
Éste le parece muy mundano, así que decide que el mejor es: Don Monseñor.
Pero, para asegurarse de no meter la pata, le pregunta a la Madre Superiora: Madre, ¿Monseñor se pone con 'Don'?
¡Claro que se pone condón hija, si no este convento sería una guardería!

domingo, 5 de julio de 2015

POR EL PARQUE

Una pareja pasea por el campo. Al cruzar el puente de un caudaloso río, ella pregunta: Querido, si me cayera al agua, ¿me salvarías?
Si digo que sí, ¿saltarías al agua?